Invertir en acciones de empresas que cotizan en mercados de valores supone un riesgo de pérdidas, dadas las fluctuaciones del valor que son parte inherente y esencial de la propia naturaleza de la inversión. Ahora bien, la legislación vigente es contundente a la hora de proteger a los inversores contra las pérdidas que hayan sido ocasionadas por una información imprecisa, errónea o poco veraz sobre la situación financiera de la empresa o entidad en cuestión.
Si hemos invertido en valores de una empresa o entidad sobre la base de una información lo bastante inexacta como para hacer imposible prever, dentro de unos parámetros lógicos, la futura evolución del valor de nuestra inversión, estas no son pérdidas legítimas y tenemos derecho a exigir la devolución del capital invertido. La bolsa es tal vez un juego de riesgo, pero en todo caso un juego con reglas que hay que respetar.
Colectivo Ronda actúa en defensa de los intereses de pequeños inversores cuando este deber de información y claridad ha sido vulnerado, tal y como ha sido el caso, por ejemplo, de la salida a bolsa de Bankia.